Llegó un nuevo amanecer y con él el temido momento de enfrentarnos de nuevo a la realidad, de comprobar q todo lo q has hexo sirve de algo, q el muro construido cn tanto esfuerzo aguantará bien la marea,ya es hora de ver el resultado...
Allí frente al oleaje, todo parecía un remanso de paz, nada a la vista,todo iba bien...pero mientras miraba la arena caí en el olvido de dnd estaba, viniendo de repente un huracán de recuerdos que provocó las olas y que yo acabara empapada desde la cabeza a los pies... eso pasa por no estar alerta...
Pero el huracán no ofreció tregua y hubo ke levantar la pared en medio de la tempestad...la verdad fue bastnte fácil, pues en poco tiempo había conseguido un método para alzarla rápidamente. Con ésta en pie todo parecía más fácil, nada podía atravesarla, al menos eso pensaba... de momento resistió bien los primeros golpes q cayeron sobre ella, pero muy lentamnte iban apareciendo pequeñísimos huecos q daban lugar a creer q akello no tardaría muxo en desmoronarse... A través de ellos iban apareciendo pequeños rayos de luz, de sobra conocida por su forma de deslumbrarme...de lo que en su día había sido faro, no kedaba ya más k leves reflejos de algunas estrellas, q por estar muy lejos no significaba q su luz no pudiera provocar diferentes reacciones en akellos k la vieran. Así tras el muro quedé, observando por esos agujeros la luz q hasta mí llegaba y sintiendo el silbido del viento k invitaba a recordar lo q hacía tiempo, había acontecido en la playa.
22 septiembre 2005
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